Ricinus communis es el nombre oficial de la sorprendente planta de la que se extrae el aceite de ricino, comúnmente conocido como Castor oil o aceite de castor, ya que antiguamente se usaba en cosmética como sustituto de este aceite.
¿Cómo se obtiene?
Normalmente es obtenido por primera presión en frío de las semillas, obteniendo un aceite vegetal puro de color amarillento y viscoso.
Composición
Es rico en ácidos grasos monoinsaturados como el ácido ricinoleico, que proporciona un efecto protector al aplicarse en la piel, las uñas o el cabello.
Además, entre los ácidos grasos poliinsaturados de su composición se encuentra el omega 6, el cual aporta una gran resistencia y una alta capacidad de reparación del tejido cutáneo, las uñas y el cabello.
Usos
- Protección y nutrición de cabellos secos y/o dañados: aplicar con un ligero masaje sobre el cabello dos o tres veces por semana. Dejar reposar una hora y posteriormente lavar.
- Acelerador del crecimiento de las pestañas: aplicar con un goupillon en el nacimiento de las pestañas antes de dormir. Lavar bien al día siguiente con un limpiador específico para los ojos.
- Fortalecedor de uñas: aplicar una gota en cada uña con un suave masaje e insistiendo en la cutícula. Dejar actuar toda la noche.
- Antiacné: sus propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias lo hacen perfecto como ingrediente clave en cremas antiacnéicas.
- Laxante: el aceite de ricino aumenta el peristaltismo del intestino, es decir, favorece los movimientos naturales del intestino consiguiendo movilizar las heces y favoreciendo su expulsión.
- Emoliente y cicatrizante: el aceite de ricino se usa en cremas y apósitos con el fin de hidratar, nutrir y cicatrizar heridas. Además, actúa como vehículo perfecto para otras sustancias activas.
¿Cómo lo puedo conseguir?
Este aceite es ampliamente comercializado en distintos formatos, orientados cada uno de ellos a una zona de aplicación.
Podemos encontrarlos en forma de aceite vegetal, para usarlo «puro» o como vehículo de otros aceites esenciales, como ingrediente en las formulaciones de multitud de cremas o incluso en forma de «máscara de pestañas».
Recuerda que en la farmacia, puedes encontrar a un profesional que te asesorará sobre las distintas opciones y te indicará en que casos no está recomendado su uso.
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